En el caluroso verano, beber una lata de cola refrescante es un hábito para muchos jóvenes. Algunos incluso la consumen hasta el punto de causarles problemas de salud, pero aun así no pueden dejarla, lo que hace que muchos se pregunten si la cola tiene algún tipo de "atracción fatal". El Instituto Nacional del Consumo (L'institut National de la Consummation, INC) publicó el 27 un estudio que muestra que las dos principales marcas de cola presentes en el mercado contienen trazas de alcohol (l'achool), lo que puede explicar el fenómeno de la adicción, pero también ha provocado una controversia religiosa. Según un informe del semanario francés L'express, los resultados del estudio publicados el día 27 en la revista 60 Million de consommation indican que más de la mitad de las bebidas de cola vendidas en Francia contienen trazas de alcohol, con una concentración de aproximadamente 0,001%, o 10 mg por litro. Curiosamente, tanto Coca-Cola como Pepsi, las dos marcas líderes, admitieron que algunos ingredientes producen reacciones al alcohol durante el proceso de fabricación, al igual que algunas frutas contienen alcohol, por lo que no lo evitarán deliberadamente, pero han enfatizado repetidamente que no se utiliza alcohol en absoluto. Al beber Coca-Cola un sorbo tras otro, resulta que es la pequeña cantidad de alcohol que contiene la que causa adicción. (Foto tomada del periódico francés "Le Figaro") La controversia generada por este resultado radica en que muchos jóvenes musulmanes no pueden beber alcohol debido a sus enseñanzas religiosas, y la proporción de ellos que consumen refrescos de cola es bastante alta. La cuestión de si la mínima cantidad de alcohol que contiene hace que todos "infrinjan las reglas" ha generado acalorados debates en la comunidad musulmana. Michel Pepin, uno de los ejecutivos de Coca-Cola Francia, dijo que el Comité de la Mezquita de París había hecho anteriormente una declaración de que los productos de la compañía cumplían con la prohibición islámica del alcohol y que beberlos no era ilegal. El diario francés Le Figaro también señaló que según las investigaciones de los investigadores, el contenido de azúcar de todas las colas es alarmantemente alto, con un promedio de 100 gramos de azúcar por litro, equivalente a 17 terrones de azúcar; además, la fórmula estadounidense utiliza más jarabe de maíz (des sirops de maïs), mientras que la fórmula francesa no. Lo peor es que el contenido de cafeína en ellos es casi siempre superior a 100 mg/1 litro, lo que equivale a 1 o 2 tazas de café, muy por encima del rango que los niños pueden consumir. Muchos nutricionistas y médicos franceses están muy descontentos con el hecho de que los dos "magnates de la cola" no revelen los ingredientes de la cola alegando confidencialidad comercial. Además del contenido de azúcar y cafeína ya mencionado, las especias utilizadas también conllevan riesgos potenciales. Según un médico especialista en alergias, los "sabores naturales" que aparecen en las etiquetas de ingredientes pueden contener diversos extractos de plantas y una sustancia llamada "terpenos", que puede provocar síntomas alérgicos en algunos niños. Sin embargo, los fabricantes nunca han cumplido con su obligación de informar a los consumidores. |
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